El cantante de PIER demuestra ser más forro que de costumbre

El material fotográfico lo dice todo, Ramiro Cerezo cada día que pasa está un poco más cojido que antes. Esta vez no tuvo mejor idea que tatuarse en la espalda un dibujo del disco y el logotipo de su banda “PIER”, para llevarlos hasta el día de su merecida muerte, como estandartes en una piel que contiene las viseras de uno de los seres humanos más despreciables del universo del Rock.Realizarse el tatuaje no fue una tarea sencilla para Ramiro, discutió con más de un tatuador, por el hecho de que ninguno era capaz de tolerar la presencia del “Rockero forro” por más de 15 minutos en la silla, ya que el mencionado “cojido” no para de tararear un segundo la letra de “Sacrificio y Rock & Roll”, o el Hit de los Bee Gees “Staying alive”. Ramiro recorrió 4 locales de tatuajes para dar por terminado el sello que hoy ostenta en la espalda, en algunos negocios los artistas de la tinta china simplemente se enfadaron hasta amenazarlo con un golpiza si no se retiraba del lugar, y hasta llegó a vivir un episodio que pudo ser trágico de no ser por la presencia de su hermano Agustín y su amigo el “Pato” Fontanet (El cual fuera un compañero en su antiguo trabajo de mudanzero en la localidad de Adrogué), quienes advirtieron que el tatuador estaba dispuesto a estamparle la palabra “COJIDO” con letra gótica debajo del dibujo elegido por Ramiro, ante su benevolente entrega y total descuido a las espaldas del enojado y socarrón empleado.