Voten a Breide Obeid, que abandonó las armas y tomó las urnas

En nuestro país nos han enseñado que la “Represión”, es una mala palabra, pues yo seré el paladín de la justicia, que vendrá a desmitificar, con aquel viejo dogma que hemos olvidado. Aquí la inseguridad diaria, que nos acomete, no puede ser combatida con planteamientos moralistas y razonables, a la gente que mata, roba o vive de manera indigna, hay que desterrarla de la realidad. Para lograrlo hay que ser un hombre firme y de convicciones sólidas, y yo como representante del PPR, fundaré las nuevas bases de un movimiento de reorganización nacional, que es más que necesario por estos días.Con la fe puesta en DIOS y con profunda convicción, los convoco a sumarse a los miles de argentinos que nos acompañan en esta difícil misión de recuperar el país que nos merecemos y asegurar a las generaciones por venir, un futuro venturoso.Como presidente, debo asegurar la salud, a mis conciudadanos, restaurando el sistema hospitalario nacional, conmigo en el gobierno garantizo que el hospital POSADAS, por dar un ejemplo, va funcionar como lo hacia antes, retomando su esplendor de los 70'.

El tema educacional, no es problemático, vengo de un entorno donde he sabido hacerme entender muy bien ante mis subordinados, las esuelas militarizadas, siempre dan buenos resultados porque lucran con el miedo de los infantes, y si hay algo que aprendí a explotar con mis años en las fuerzas es a sacar réditos del miedo de mis pares.Como candidato, prometo ensuciarme las manos para llevar a mi patria a la ansiada prosperidad, y si es necesario ensuciármelas con sangre, lo haré.